No conocí a mi abuelo Pasquale: yo tenía menos de dos años de edad, pero él llegó a tenerme en brazo. La vicisitudes de la segunda guerra llevaron a los hombres viejos y mujeres, -pues todos los jóvenes y no tanto, habían sido enviado a la contienda-, a quedarse bajo las bombas del enemigo.
Para evitarlas en lo posible, se dejaban las zonas peligrosas como aquella donde vivíamos en pleno perímetro del puerto, para refugiarse en algún pueblo de poco interés bélico. Te todo modo las bombas igual llovían del cielo. Transitoriamente se pasó del pueblo de Santa Elia a Santa Flavia y Villabate.
Luego del desembargo de los Aliados en Sicilia, se volvió a la casa familiar, por supuesto destruida por los bombardeo y alcanzada por las esquirlas y tiros de ametralladoras.
Los dos viejos hombres de la familia, Pasquale y el cuñado Turiddu, fallecieron uno en Santa Elia en 1941, el otro ya en Palermo en 1944. Mi madre, yo de cuatro años, mi hermanita de dos, y una tía esposa de Turiddu, tuvieron que enfrentarse con la nada y con todo. Luego llegarían los 'reduci' de la guerra, de los campos de prisioneros, sea franceses, ingleses, estadounidenses.
Mi abuelo Pasquale: un navegante único.
Mozzo, marinaio, nostromo, nocchiere.
Mio nonno Pasquale: un navigante unico.
Grumete, marinero, contramaestre.
El 10 de junio de 1940, escuchando la declaración de guerra hecha por Mussolini a Gran Bretaña y Francia, mi abuelo exclamó: "la guerra con todos, menos con los ingleses". Sabía con quien se ponían los italianos y lo que iba a costar.
Perdóneme si comencé por los últimos años de la historia: las cosas de las guerras no son faciles de olvidar.
Bien, mi abuelo Pasquale nació el 24 de abril de 1897 en Palermo, hijo de Maria Ragna y Vincenzo Marchese, otro navegante nacido en el 1812 y muerto ahogado en un accidente en el puerto de Palermo el 2 de enero de 1898.
A los doce (12) años ya tenía su libreta de embarque con matrícula n. 13134 del Compartimiento Marítimo de Palermo, emprendiendo viaje en calidad de grumete a bordo del piróscafo 'Cariddi' el primero de julio de 1880. Siguió impertérrito por el espacio de 52 años con 47 años 8 mese y 8 días de navegación efectiva., principalmente con la floreciente Navigazione Generale Italiana de Florio e Rubattino. A los 64 años y 3 mese de edad fue literalmente despedido, hecho acaecido en Genova el 16 de julio de 1931. En aquella ocasión el hijo Gaetano que también se encontraba en Genova lo fue a visitar, encontrándolo llorando y pidiendo el motivo contestó: "me han echado a tierra".
